La desgasificación es un proceso fundamental en el tratamiento de agua industrial que consiste en eliminar los gases disueltos presentes en un líquido, como oxígeno (O₂), dióxido de carbono (CO₂), metano (CH₄) o sulfuro de hidrógeno (H₂S). Estos gases, aunque invisibles, pueden provocar efectos indeseados en los procesos productivos, especialmente en aquellos que requieren agua de alta calidad.
La presencia de oxígeno, por ejemplo, acelera los procesos de corrosión en tuberías, calderas o intercambiadores de calor. Por su parte, el dióxido de carbono puede reaccionar con el agua y formar ácido carbónico, alterando el pH y comprometiendo la estabilidad química del sistema. Por ello, eliminar estos gases no es solo una cuestión de pureza, sino de eficiencia, seguridad y durabilidad del proceso industrial.
¿Cómo Funciona la Desgasificación?
Existen distintas tecnologías para realizar la desgasificación, cada una con sus ventajas según el tipo de gas a eliminar y la aplicación específica:
La desgasificación térmica consiste en calentar el agua hasta cerca de su punto de ebullición, reduciendo así la solubilidad de los gases. Este método se utiliza sobre todo en sistemas de calderas, donde el oxígeno y el CO₂ deben eliminarse de forma eficiente para evitar la corrosión interna.
La desgasificación por vacío trabaja reduciendo la presión en el sistema, lo que provoca que los gases se separen del líquido sin necesidad de calor. Es especialmente útil cuando se desea eliminar gases como el metano o el sulfuro de hidrógeno, ya que mejora la calidad del agua sin modificar su temperatura.
La desgasificación por membranas utiliza membranas hidrofóbicas que permiten el paso de gases pero no de agua, permitiendo su extracción de forma selectiva. Es una tecnología limpia y sin reactivos, ideal para procesos que requieren altos niveles de pureza como la industria farmacéutica o la electrónica.
Ventajas Frente a Otros Procesos
Una de las grandes ventajas de la desgasificación es que no solo mejora la calidad del agua, sino que también protege los equipos industriales. Al eliminar gases corrosivos, se reduce significativamente el desgaste de calderas, tuberías y componentes metálicos.
Además, al eliminar CO₂, se estabiliza el pH del agua, evitando fluctuaciones químicas que pueden comprometer procesos sensibles o dañar productos en fases de producción. También mejora el rendimiento térmico del sistema al evitar incrustaciones y burbujas que afectan el intercambio de calor.
Otra ventaja relevante es que, al reducir la necesidad de productos químicos para el control de pH o inhibidores de corrosión, se disminuye el coste operativo y el impacto ambiental. La desgasificación permite, en muchos casos, cumplir con normativas medioambientales sin recurrir a tratamientos agresivos o costosos.
Aplicaciones Industriales de la Desgasificación
La desgasificación se aplica en un amplio abanico de sectores industriales. En la industria alimentaria y de bebidas, se utiliza para evitar la oxidación de productos y mejorar su estabilidad. En el sector farmacéutico y cosmético, es fundamental para garantizar agua ultrapura en formulaciones, enjuagues o procesos de limpieza.
En plantas de energía, se emplea para tratar el agua de alimentación de calderas, evitando corrosión e incrustaciones que comprometerían la eficiencia energética del sistema. También es muy común su uso en el tratamiento de aguas industriales, especialmente en aquellas que deben reutilizarse o descargarse cumpliendo parámetros de calidad.
En todos los casos, la eliminación de gases no solo mejora la calidad del agua, sino que protege los activos de planta y garantiza la estabilidad del proceso.
Cómo Elegir el Sistema de Desgasificación Adecuado
Seleccionar el sistema de desgasificación correcto depende de varios factores. En primer lugar, es clave identificar qué gases están presentes en el agua y en qué concentración. No es lo mismo eliminar oxígeno que sulfuro de hidrógeno, ya que cada uno requiere una tecnología específica.
También se deben considerar la temperatura, la presión y el caudal del sistema. Algunos procesos pueden integrar mejor una tecnología térmica, mientras que otros requieren una solución por vacío o con membranas por restricciones de espacio o sensibilidad térmica del producto.
Otro punto relevante es la compatibilidad con el resto del tratamiento de agua. Muchas veces, la desgasificación forma parte de un tren de tratamiento que incluye filtración, ablandamiento u ósmosis inversa, por lo que su diseño debe contemplar una integración fluida y eficiente.
Finalmente, la facilidad de mantenimiento, el coste energético y la disponibilidad de recambios son aspectos prácticos que también deben valorarse para garantizar la continuidad operativa.
Peiró: Soluciones en Desgasificación para la Industria
En Peiró, diseñamos e implementamos soluciones de desgasificación industrial adaptadas a las necesidades reales de cada cliente. Nuestro equipo técnico analiza las características del agua, los requisitos del proceso y las condiciones de planta para seleccionar la tecnología más adecuada, sea térmica, por vacío o por membranas.
Además, acompañamos cada proyecto con soporte técnico, formación y mantenimiento, garantizando que el sistema funcione de forma estable y eficiente a lo largo del tiempo. Si estás valorando implementar un sistema de desgasificación, te ayudamos a definir la mejor opción, siempre con una visión de largo plazo, eficiencia y rentabilidad.
También puedes consultar nuestras soluciones de filtración, ósmosis o tratamiento previo, que se integran perfectamente con sistemas de desgasificación en procesos industriales complejos.
